lunes, 28 de noviembre de 2011

Y en la búsqueda...

La trama y el desenlace by Jorge Drexler on Grooveshark

De estructura para mi trabajo final de este año encontré este poema de Neruda (Que siempre me salva, siempre me consuela). Esto de ir y venir en ideas me tienen un poco impaciente, supongo que esto también es parte de ir armando la trama.

Armar mi propia estructura viene siendo todo un desafío, sobre todo por todas esas voces que a uno siempre le aparecen. Tengo miedo, pero parece que no soy la única.

Poco a poco creo que estoy armando el mapa. Creo... hay que creer para llegar.

Let's see how we get there.


MUCHOS SOMOS

DE tantos hombres que soy, que somos,
no puedo encontrar a ninguno:
se me pierden bajo la ropa,
se fueron a otra ciudad.

Cuando todo está preparado
para mostrarme inteligente
el tonto que llevo escondido
se toma la palabra en mi boca.

Otras veces me duermo en medio
de la sociedad distinguida
y cuando busco en mí al valiente,
un cobarde que no conozco
corre a tomar con mi esqueleto
mil deliciosas precauciones.

Cuando arde una casa estimada
en vez del bombero que llamo
se precipita el incendiario
y ése soy yo. No tengo arreglo.
Qué debo hacer para escogerme?

Cómo puedo rehabilitarme?
Todos los libros que leo
celebran héroes refulgentes
siempre seguros de sí mismos:
me muero de envidia por ellos,
en los filmes de vientos y balas
me quedo envidiando al jinete,
me quedo admirando al caballo.

Pero cuando pido al intrépido
me sale el viejo perezoso,
y así yo no sé quién soy,
no sé cuántos soy o seremos.
Me gustaría tocar un timbre
y sacar el mí verdadero
porque si yo me necesito
no debo desaparecerme.

Mientras escribo estoy ausente
y cuando vuelvo ya he partido:
voy a ver si a las otras gentes
les pasa lo que a mí me pasa,
si son tantos como soy yo,
si se parecen a sí mismos
y cuando lo haya averiguado
voy a aprender tan bien las cosas
que para explicar mis problemas
les hablaré de geografía.

martes, 8 de noviembre de 2011


Hace días que he querido escribirlo y me detengo a pensar las cosas que debería decir; mientras hago la enumeración me doy cuenta que de nuevo estoy volando y no quiero detenerme; así que no escribo, sólo deseo, deseo intensamente.

Deseo enamorarme, deseo tenerlo en mi cama y cantarle para que duerma. Deseo que se enamore y me lleve a su casa a tomar el té, que me traiga galletas con helado sólo para mi. Deseo mirarlo, mirarlo tanto, decirle que se ha tardado mucho y aún así que me espere todavía un poquito más. Es que tengo miedo.

Es eso... un poco o mucho, tengo miedo porque cuando me enamoro aparece la mujer brillante que me habita, tengo miedo porque no sé que puede suceder, tengo miedo porque se que esa mujer brillante en mi es más valiente que mi dócil yo cotidiano. Cuando se juntan hay una danza en mis entrañas que necesita crear imágenes, sonidos, sensaciones... crear todo lo que no puede ser dicho en palabras, crear, crear. Manifestar.

Entonces mis símbolos y mi movimiento se enlazan para grabar contenidos que sean difícilmente borrados... unas palabras que no se ven... algunos pedidos que se sienten.

Con tanto deseo dentro tengo miedo de que todo se nuble, tengo miedo de sacar a la calle todas esas cosas que quiero compartir y encontrarme sola. Creo que es mejor estar sola aqui dentro que sola allá afuera. Creo. Por lo menos aquí puedo cuidar de mi y de los que lleguen.

Pero si salgo necesito que alguien de cuando en cuando me de una mirada amable, necesito que alguien me hable sabiendo que yo tengo cierta cadencia pausada algunos días y cierta velocidad pájara algunos otros, necesito que sepa que lloro, lloro mucho. No siempre lloro de tristeza, no se preocupen, lloro porque siento muy intenso y el sentir se me desborda. Lloro cuando algo me da mucha ternura, cuando rio a carcajadas, cuando me conecto. Si lloro en silencio entonces si podría haber algo seriamente feo. Necesito un compañero calmo.

Con esa calma que estoy tratando de cultivar, estoy arreglando mis espacios, porque siento que es tiempo y quiero estar lista. Quiero que mi voz este tan afinada como mis manos, que mis palabras tengan la fuerza de mis piernas. Quiero que la luz que tengo se vea en las paredes y espolvorear mis buenos deseos en cada plato de comida caliente que se sirva a la mesa.

No quiero parar de sentirme así, me gusta mucho.

Lo deseo mucho.

Necesito compartir, necesito que alguien también quiera hacerlo conmigo.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

viernes, 21 de octubre de 2011

Sueño para la memoria


Estaba yo entrando a una casona al lado de una playa, una bahía con la que he soñado antes. Parecía de tarde y había un poco de neblina, sin embargo todo se veía claro. Caminaba de subida viendo el mar color verde agua,  parecía que hacía frío y el viento soplaba fuerte pues las olas de la bahía se movían con fuerza.

Subí unas escaleras que iban de la playa a la casona junto con mi familia: mi mamá, mis dos hermanos y una niña con la que he soñado otras veces más (Algunas veces es una recién nacida, otras tiene como un año, esta vez parecía de tres o cuatro). Entrábamos a la casona y esta tenía un patio central y balcones con unos cuantos geranios que colgaban; cada uno se dispersaba por su lado y yo empezaba a explorar la casa junto con mi hermano pequeño y la niña curiosa. Mi hermanito se paseaba a mi lado con la paciencia observadora de siempre y la niña corría de un lado a otro, se iba y regresaba a donde yo estaba sin decir una palabra pero siempre mirándome, como si esperara hacerme cómplice de lo que veía.

Caminábamos los tres, subimos al segundo piso y al andar por los balcones encontramos a tres personas, dos hombres y una mujer sentados en unas bancas junto al balcón, todos como de 50 años tal vez con ropa antigua, ellos enternados y ella con un vestido largo de color negro, todos parecían polvosos.

Nos fuimos acercando; yo me senté en una banca que había frente a los tres, mi hermanito se puso a mi izquierda y la niña a mi derecha. Miré a los señores de nuevo y ya estando cerca  me di cuenta que se veían fantasmagóricos. Entonces ellos empezaron a hablarme.

Parecían urgidos por algo, como si no debieran estar ahí o como si no tuvieran tiempo. Empezaron a presentarse: “Nosotros somos”… Cesar… Augusto… algo así,  no lo recuerdo bien, pero a medida que lo decían veía como sus nombres se iban escribiendo en el aire como con letras de máquina de escribir en lienzo transparente.  

Sentados frente a mi estaban los dos hombres a la derecha y la mujer a la izquierda; el hombre del centro lideraba las palabras y los otros complementaban lo que decía mientras me miraban fijamente, decían varias cosas que no recuerdo del todo, pero me repitieron varias veces:

“V, es muy importante que recuperes la historia de los González Cueva, nosotros ya no podemos hacerlo, es muy importante que recuperes las memorias de los González Cueva, es muy importante, nosotros ya no podemos hacerlo; es muy importante…” Mientras se inclinaba desde su silla como para tocarme, pero no lo hacía. 

Los otros decían palabras que ya no recuerdo, lo que sí me queda en la memoria es la urgencia de sus movimientos, como dándome instrucciones, muy serios, muy amables, parecía que querían que me quede muy claro lo importante de la solicitud.

Entonces escuché la voz de mi mamá, que nos decía que ya teníamos que irnos a una graduación, creo que de mi otro hermano o algo así, una ceremonia para la que ya estábamos tarde. Los personajes fantasmagóricos desaparecían y toda la familia empezaba a tomar sus cosas para irnos.

A mitad de camino hacia la ceremonia mi mamá me dice que se olvidó un documento, algo que había que llevar al lugar a dónde íbamos, algo que era importante… que no lo había traído… decía dándole miles de vueltas a lo mismo  y antes de que siga desesperando le digo que yo regresaré a casa a buscarlo. Ella se fue en un auto negro.

Entonces me veía patinando a toda velocidad por las calles de Vista Alegre, por un lugar cercano a donde viví hace unos años. Iba súper rápido y las veredas estaban rotas por algunos pedazos y lizas por otros, así que iba saltando y esquivando los pedazos rotos. Junto conmigo iban mi hermano Aarón y la niñita, no sé si corriendo súper rápido o en patines también, pero iban a la par conmigo. Veía sus manitos apuradas.

Me di cuenta que delante de mi habían unas escaleras y yo venía muy rápido, recordé que mis patines no tienen el freno común que esta fuera, si no uno incorporado dentro de la bota y el cual me cuesta encontrar siempre que uso los patines luego de mucho, pensé que no tenía tiempo de volver a explorar dónde estaba, pero si no lo hacía rápido me iba a ir de bruces por las escaleras.

Entonces recordé que yo sabía frenar girando las ruedas hacia un lado y decidí hacerlo. Mientras escuchaba el raspar de las ruedas pensaba regañándome “Tu sabes que las ruedas se malogran de esta forma”,  pero cuando me detuve al justo filo de la escalera mi regaño dejó de importarme de puro alivio, al ver que paré justo a tiempo.

Parada al filo me dije: Ok, bajar escaleras en patines… ¡Ah! Lo he hecho tantas veces… y las bajé corriendo como cuando era más chica.

Llegué a la casona con mi hermanito y la niña, buscaba el documento por todos lados mientras ellos me seguían. Entrábamos a cuartos fríos de ventanas abiertas que daban al mar, abríamos cajones, revisaba las mesas.

Buscaba y buscaba algo que nunca había visto pero que me habían dicho era importante, en cajones que no conocía, en una casa que no era mía.

Desperté.

jueves, 20 de octubre de 2011

El cuaderno azul poemario

Las ilustraciones de este proyecto colectivo estan geniales.

Únanse!

Abajo más datos y nota de prensa para la libre difusión :)

Wishes.

:: Nota de prensa ::

Quizás has aparecido aquí y no sabes dónde estás ni qué hacemos. Te contamos. El Cuaderno Azul. Poemario es un texto de poesía experimental de versos cortos y lúdicos que se contruye sobre un directorio telefónico encontrado en un consultorio psiquiátrico. El directorio telefónico fue antes un cuaderno azul común y corriente al cual se le agregó un marcador alfabético al lado lateral. A. B. C. D. E. F. G. H. .

Poco a poco el cuaderno fue llenado de versos según las letras que el directorio telefónico sugería. Así, si el concepto de un verso se aferraba a la letra «T», pues hablaba del Tiempo, entonces era colocado en aquella letra. Todo esto pasó desde el 2008 hasta ahora.

Posteriormente, se nos ocurrió la idea de entregar el Cuaderno Azul. Poemario a amigos artistas para que lo leyeran, escogieran un verso y compusieran una ilustración inspirada en el verso que eligieron. De esta forma, el proyecto fue creciendo, así como el número de artistas interesados en ilustrar el poemario. Fue así como el proyecto se tornó en un proyecto de poesía visual colaborativo. El mecanismo es sencillo. Nos escribes pidiendo ilustrar el poemario. Te lo enviamos. Lo lees. Compones una ilustración inspirada en el verso que escogiste. Nos la envías y la publicamos.

Así el proyecto crecio y creció y no solo recibimos ilustraciones de nuestra ciudad, Lima (Perú), sino de diversos lugares del país y del mundo. De algún tiempo a esta parte hemos recibido ilustraciones desde París (Francia), Murcia (España), Tegucigalpa (Honduras), Buenos Aires (Argentina), Santiago (Chile), Sao Paulo (Brazil), Bogotá (Colombia) entre otros.

La convocatoria a artistas que deseen ilustrar o apropiarse – a través de cualquier disciplina artística – de los versos aún está abierta. Los interesados en ilustrar, apoyar el proyecto mediante palabras de aliento o auspicios o simplemente recibir más información pueden escribirnos a azul.cuaderno@gmail.com. Estaremos encantados de responder.

Facebook. www.facebook.com/Cuaderno.Azul.Poemario

Correo. azul.cuaderno@gmail.com

Flickr. www.flickr.com/photos/cuadernoazulpoemario

martes, 11 de octubre de 2011

Chocolate sonrojado

A. me escribió luego de encontrarnos en la calle por unos minutos:

Hoy me di cuenta que es muy lindo verte, tú tienes una energia diferente...siempre sonriente y saltando, y encima me sacas la lengua... creeme, me rayas... que bonito es que revolucionen una vida... chocolate para el alma. 

Y yo, me sonrojé un poquito.

Encontrado hoy

De Jaime Sabines

Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me receto tiempo, abstinencia, soledad.
¿Te parece bien que te quiera nada más una semana? No es mucho, ni es poco, es bastante. En una semana se puede reunir todas las palabras de amor que se han pronunciado sobre la tierra y se les puede prender fuego. Te voy a calentar con esa hoguera del amor quemado. Y también el silencio. Porque las mejores palabras del amor están entre dos gentes que no se dicen nada.
Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y subversivo del que ama. (Tú sabes cómo te digo que te quiero cuando digo: «qué calor hace», «dame agua», «¿sabes manejar?», «se hizo de noche»... Entre las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he dicho «ya es tarde», y tú sabías que decía «te quiero»).
Una semana más para reunir todo el amor del tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para entender las cosas. Porque esto es muy parecido a estar saliendo de un manicomio para entrar a un panteón.

domingo, 25 de septiembre de 2011

Infeliz

Yo nunca voy a perdonarte, he querido pensar que si, muchos días, todos los días, pero la verdad es que no. Eso no va a suceder.


He repetido millones de veces que espero que seas feliz y no es cierto, lo repito para no sentirme la infeliz que desea que pases por unas cuantas infamias, para tratar de poner en práctica ese discurso de poner la otra mejilla y en mis acciones seguramente va por ahí; pero en lo más profundo de mis entrañas espero que algún día, aunque sea por un ratito, sientas que lo que tienes no sirve para nada.

No te perdono, No. Y espero que en algún momento te pudras de dolor… ¡Ah no!, perdón… eso sería demasiado bueno, espero que te pudras en tus propias irresoluciones, vivir contigo mismo es más que suficiente.

viernes, 23 de septiembre de 2011

EL MIEDO

Todos me piden que dé saltos,
que tonifique y que futbole,

que corra, que nade y que vuele.

Muy bien.



Todos me aconsejan reposo,

todos me destinan doctores,

mirándome de cierta manera.

Qué pasa?



Todos me aconsejan que viaje,

que entre y que salga, que no viaje,

que me muera y que no me muera.

No importa.



Todos ven las dificultades

de mis vísceras sorprendidas

por radioterribles retratos.

No estoy de acuerdo.



Todos pican mi poesía

con invencibles tenedores

buscando, sin duda, una mosca.

Tengo miedo.



Tengo miedo de todo el mundo,

del agua fría, de la muerte.

Soy como todos los mortales,

inaplazable.



Por eso en estos cortos días

no voy a tomarlos en cuenta,

voy a abrirme y voy a encerrarme

con mi más pérfido enemigo,

Pablo Neruda.

jueves, 22 de septiembre de 2011

Dream

 


Y le pregunté a Dios quién se supone que debo ser.
Las estrellas me sonrieron, Dios respondió en un silencioso ensueño. Dije una plegaria y me quedé dormida.

He tenido un sueño
Podía volar desde el árbol más grande.
Tuve un sueño.

Ahora soy mayor y tengo un sentimiento gris.
No sé que más queda por decir sobre esa vida que estoy dispuesta a dejar.

He vivido mucho y he vivido bien,
y como en  muchas historias que he vivido para contarlo.
Ya estoy lista, estoy lista ahora.
Estoy lista para volar desde lo alto.

Yo tengo un sueño.  

lunes, 19 de septiembre de 2011

Dime dime dime ¿¿Si??

Dime si te causo una revolución,

Dime si te hago cambiar tu canción,

Dime si te hago suspirar,

Dime si te haré volver a empezar.



jueves, 15 de septiembre de 2011

Las migraciones


La confusión inicial
El fuego que quema
El mar embravecido
El buho y la mariquita
El nido que protege
Las casas que alimentan
El pulpo enamorado
El pulpo hambriento
Los monstruos del mar
Los calzones al aire
Las medias viejas
Las cosas que guardamos entre nuestras paredes
La lluvia sobre lo mojado
Los destellos de luz
Las grandes flores
Los deslizamientos que no sabemos hacia dónde nos llevan
Las aves de mar y de tierra
Las vorágines que crecen a escondidas
Las casas interconectadas
La salamandra mítica ha crecido y al terminar ha parído un ser alado
¿A dónde va?

lunes, 12 de septiembre de 2011

Memoria de elefante

"Todo aquello que apela a la imaginación y al sentir verdadero activa y moviliza los sentimientos, facilitando el aprendizaje y la memoria."

Sobre la pedagogía Waldorf, en algún lugar de la web.




"Me hace total sentido"
Yo, apapachosa que lo recuerda todo.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Sueño y Memoria


¿Cuál es la diferencia entre sueño y memoria?

Cuál es la diferencia cuando los sueños dejan rastros de existencia, cuando la memoria se siente tan brumosa que dudas que haya existido.

Sueño y memoría... Estarán hechos de lazos semejantes tal vez, una suerte de primos.

Dejo mi pregunta abierta para que resuene en los próximos días, para ver que resulta.


lunes, 5 de septiembre de 2011

Ella y Él

Ella se movía adormecida entre sus sábanas,  respirando como si estuviese regresando de algún lugar lejano. Aturdida, abrió los ojos y volvió a cerrarlos.

Ella estaba parada con un hombre, vestida de fucsia y panuelo en el cabello, Él de uniforme solémne: los dos hablaban acerca de lo que iba a suceder en breves momentos.

Ven acuéstate en mi regazo unos momentos, antes de que todo termine, le dijo ella con suavidad.

Ella conocía a su pueblo, sabía de que eran capaces, sabía que no iban a tener misericordia de él; no importaba quien fuese, ellos sólo iban a pedir sangre en su revolución. Los días de tensa paz se habían terminado.

Cuando se conocieron nunca pensaron en estar juntos, él venía de muy lejos y de dejarlo todo, ella venía de un pueblo que cargaba con años de injusticias. El destino siempre junta a las personas para que aprendan uno del otro en su camino.

Ambos vivían en una alianza donde el imperio de llegada era representado por él y el pueblo invadido por ella. Ambos simbolizaban un tenso acuerdo que había surgido luego de una matanza de muchos años, donde todos culpaban a todos y al no saber con certeza quien era el culpable decidieron tranzar una alianza; no eran los primeros en gobernar, pero si serían los últimos.
 
Cuando él decidió aceptar ese puesto sabía que si todo se rompía él sería quien daría la cara por su imperio, sabía que si algo pasaba sería él quien moriría; pero como buen guerrero aceptó su camino y decidió defender la paz de la alianza.

Ella llegó allí por herencia, simplemente aceptó lo que su pueblo le había enseñado desde pequeña: sus ancestros y familiares gobernaron y ahora no quedaba más nadie que ella.

Así, en esas circunstancias ellos aprendieron a amarse.

Pero la alianza había sido traicionada en secreto y el pueblo había vuelto a levantarse en busca de culpables. Lo único que sabían a ciencia cierta es que todos lo acusaban a él y pronto vendrían a tomar su cabeza. Ella sabía, sabía que el no tenía culpa alguna, pero no tenía como probarlo.

No importa, dijo él, yo voy a enfrentarlos con la verdad y si muero pues ese será mi destino.

Ella no soportó escuchar sus palabras, no podía ver torturado a su inocente amante, imaginaba cuando vendrían a buscarlo, la forma que sabía que lo harían. Ella, al romperse la alianza, debía entregarlo a su pueblo.

- No puedo entregarlo, que muera conmigo antes de que lo haga en manos de ellos; pensó.

En ese momento lo decidió.  De cualquier forma iba a ser castigada, de cualquier forma, ambos estaban condenados.

- No me importa, prefiero ser yo la que muera en sufrimiento antes que verlo torturado, se dijo.

El se acercaba y ella vertió un té que le dio a beber, el lo recibió y se recostó sobre ella.

El pareció no darse cuenta, cada segundo que pasaba en su regazo mientras ella acariciaba su cabeza iba cayendo en un profundo sueño. Ella contenía el llanto, "Quienes son peores, Quienes son peores..." se repetía mientras sin mirar besaba su frente descubierta.

Abrió los ojos, lo vio muerto. Tras un golpe en la puerta la guardía entró y ella enterró en algún lugar sus gritos, sus ojos de horror, el dolor de su crimen. Los guardías gritaban, preguntaban cosas, lo movían, la movían... su rostro parecía haberse congelado.

Ella conocía las reglas, debió entregarlo, al darse cuenta de que estaba muerto le darían muerte.

Moriré... moriré... moriré porque has muerto... moriré porque te he dado muerte, se repetía entre el miedo y el alivio Los dirigentes sublevados llegaron para entregarlo a la multitud, pero sólo estaba ella, entumecida, silenciosa entre los gritos que la acusaban de traición.

Moriré.

Traición o clemencia, no importaba, alguien debía ser castigado. La tomaron por el brazo y paso a paso la guardia la llevó entre la multitud enardecida por cada camino. Ella lloraba y no lo sentía, veía las caras de la gente que gritaba improperios mientras caminaba. Llegó a una celda de paredes enormes.

- Aquí moriré, se dijo.  Pero no fue así.

Allí la dejaron y de cuando en cuando un plato de comida rancia visitaba su puerta. "Ahora si", se decía cuando escuchaba ruidos, pero no, los días pasaban y nadie terminaba con su tribulación.

Entonces, mientras pasaban los días ella repetía: Tuve que hacerlo, no podía dejar que ellos lo hicieran, a las paredes de su celda, a los bichos que caminaban sobre ella, al polvo que la cubría, tratando de justificar esa horrible imagen grabada en sus ojos; verlo morir en sus brazos, saber que fue ella .

Los años pasaron y al no llegar la muerte a su silencio, ella la invocó a gritos, maldiciendo, suplicando, pero la única llegada era la de su comida rancia.

Ella contó las líneas de su piel y sus cabellos grises como si fueran años, veinticinco, treita y cinco, cincuenta... que importaba... ella contaba delirando.

Una mañana, con la sensación de veracidad de sus desvario cotidianos, Ella empezó a escucharlo.

"Vamos, es el momento", le repetía susurrando.  Ella no lo creía.

Durante seis días seguidos Él regresó con sus susurros, Ella, inmovil en su celda lo escuchaba cada mañana sin contestar, quietecita como animal débil. Al amanecer de la sétima mañana Él apareció por unos segundos y le dijo: "Te estoy esperando, ven conmigo"

Ella, con el mismo vestido con el que creyó debió morir hace muchos años, tocó sus ojos con la lentitud propia de sus años y dio varios suspiros mientras sentía el sol entrar por su ventana. Al ver el resplandor claro, cerró los ojos.
De un brinco salió de la cama, miró sus manos, su cuarto, tocó su piel, corrió al espejo... no, no era anciana... Pero ayer... o anoche... anoche... anoche me dormí aquí, sí, sí, sí. Miró la hora y corrió a la ducha, mientras se vestía se miraba al espejo como si desconfiara. Tomó sus cosas y se fue a trabajar como de costumbre. A la mitad del día Él la llamó diciéndole que iba a ir a su casa en la noche. Ella le contestó que lo esperaba.

Esa noche ellos hablaban serios despues de la comida, Ella lo acariciaba en su cama y tras un silencio largo El volteó y de la nada le dijo:

- ¿Estas pensando en matarme?
- No... ¿por qué?
Preguntó preocupada.
- Porque no sé, tuve esa imagen. Esta dificil esto...

Ella se asustó, no supo que decir, guardo un silencio pequeño e hizo una mueca para no contestarle.

-Entonces, ¿Qué hacemos?
- ¿De qué?
- ¿Cómo que de qué?
- Ah... perdón.
- ¿Estas prestando atención?
- Sí, sí.
- Dime entonces, lo que sea, pero dime la verdad.
- Si.
- ¿Sí?
- Sí. Lo hacemos juntos.
- Va a ser dificil...
- Lo que suceda, hagámoslo juntos

El sonrió y tomando su mejilla le dijo:

- Ya linda, no te pongas tan seria... nadie va a morir en este intento.

miércoles, 31 de agosto de 2011

Entonces...

Releerme me ha traído una aflicción gigantesca. No sólo ha sido eso, no... he reído... mucho muchísimo... pero también he hecho un reconocimiento de eventos y palabras que siento que aún siento y a la vez no.

Que siento que siento o siento que tal vez no siento, siento... pero no igual... ¡Y que vaina esto de verse a uno mismo con sinceridad!

Y es que de repente hacer un nuevo reconocimiento (o nuevo inventario) de sentimientos para sucesos pasados ha hecho que vea cosas que me duelen, pero es extraño, es un dolor que no duele, si no que sana. Creo que antes no estaba preparada para verme y decirme las cosas que ahora me digo.

De repente siento la necesidad de hacer espacio, de circular, de colorearme de otra forma. Mientras lo hago veo que tengo tanto espacio para otras cosas y eso también me asusta un poco, porque ahora que ando con esta idea de verme un poco como ex-cachibachera creo que es importante pensar en qué voy a poner en mi espacio kitsch. Preparar los espacios, los espacios en que uno recibe lo nuevo deberían tener cierta calidad de altar.

Me miro y miro mis momentos en inminente desalojo, me duelen todavía y creo que por eso busco una forma de darles la oportunidad de recrearse, porque cada que podemos encontrar algún nuevo significado ellos se liberan... y yo también.

jueves, 25 de agosto de 2011

En la orilla - Pamela Rodriguez

Me gusta mucho la música de esta chica... su álbum anterior me acompañó muchísimo y este nuevo esta lindo más.

Enjoy!


sábado, 20 de agosto de 2011

Ternura o deseo

- Eres una coqueta - dijiste, Andas por ahí y miras como niña perversa...
- ¿Y eso esta mal?
- No sé, pero te miran con deseo y eso me da ira.
- Pero yo sólo te miro a ti...
- Ya vez... lo estas haciendo de nuevo.
- ¿Qué?
- Mirarme como niña perversa, no se si me causas ternura o deseo...
- Tal vez podrían ser los dos.
- Tal vez.
- Tal vez.

Entonces, volvió a mirarme, movió un poco la cabeza y tomandome del brazo como señor antiguo dijo: ¡Ay!... Niña morena y ágil.

Yo sonreí.





Niña morena y ágil, el sol que hace las frutas,

el que cuaja los trigos, el que tuerce las algas,

hizo tu cuerpo alegre, tus luminosos ojos

y tu boca que tiene la sonrisa del agua.



Un sol negro y ansioso se te arrolla en las hebras

de la negra melena, cuando estiras los brazos.

Tú juegas con el sol como con un estero

y él te deja en los ojos dos oscuros remansos.



Niña morena y ágil, nada hacia ti me acerca.

Todo de ti me aleja, como del mediodía.

Eres la delirante juventud de la abeja,

la embriaguez de la ola, la fuerza de la espiga.



Mi corazón sombrío te busca, sin embargo,

amo tu cuerpo alegre, tu voz suelta y delgada.

Mariposa morena, dulce y definitiva

como el trigal y el sol, la amapola y el agua.


Poema XIX

Pablo Neruda



viernes, 19 de agosto de 2011

Perrito cool

Iba en el taxi y el señor taxista me grita:
-Mireeee!!!! JAJAJAJAJAJAJA

Yo, saliendo de mi asombro por el grito,volteo y veo a este señor con su perrito... y yo también me reí a carcajadas.

sábado, 6 de agosto de 2011

Lento

Ámame como en tiempo extra cotidiano



Por que probablemente nunca seré nada de lo que esperes



A veces las cosas llegan así, de las sorpresas.

viernes, 5 de agosto de 2011

¿En qué consiste la Terapia Expresiva? Un poco acerca de ella...



La terapia de arte expresiva incluye muchas modalidades de arte como la danza/movimiento, la producción de imágenes/pinturas/esculturas, música, drama, poesía, escritura y narrativa.

Las destrezas particulares del terapeuta de arte (su juicio clínico, la construcción de la relación terapéutica y la cuidadosa construcción del proceso de arte) son el parte las que apoyan a que la expresión artística del paciente se convierta en una experiencia terapéutica. Existe un continuo de terapias expresivas que ayudan a explicar los cuatro aspectos primordiales del trabajo clínico.

El nivel de lo kinestésico/sensorial se refiere a explorar los sentidos y a utilizar el movimiento y la actividad motora para entrar al proceso terapéutico, como por ejemplo cuando se trabaja con barro.

El nivel perceptivo/afectivo se da cuando el arte se utiliza para crear percepciones, por ejemplo con la línea y la forma cuando se dibuja o con las texturas y colores de la pintura para expresar ciertas emociones.

El nivel cognitivo/simbólico utiliza el arte para ayudar a resolver problemas de estructuración, secuencia, señalamiento y análisis usando al tiempo símbolos que ayuden a encontrar un camino que le de mayor sentido y significado a las experiencias del individuo.

Finalmente, el nivel creativo comprende la integración de los anteriores tres niveles.

La Terapia de Artes Expresivas busca que las personas movilicen su imaginación y su capacidad de crear a través del hacer arte, para enriquecer su mundo interno y las relaciones con otras personas y su medio, identificando sus recursos en procesos que los ayuden a centrarse e identificar retos y oportunidades. 

jueves, 4 de agosto de 2011

Not too late

Ay Ansias!! me conectaste de nuevo al sonido soft. Estaba un poco agotada de buscarlo, creo que lo estaba haciendo donde no estaba. La suavidad tiene un poder tan diferente... no puedes resistirte, no saber bien que es, pero te captura despacito.
"Yo siempre me acuerdo de ti cuando la escucho" me dijiste, ahí reparé en que claro, lo que buscaba no tenía nada que ver con el exterior; a veces uno no se da cuenta de lo que refleja hasta que alguien te lo dice.

Hoy me escribiste en la mañana:" Estás linda, no te dije ayer, pero se te ve muy muy bien". Yo tampoco te lo dije, pero ya lo sabía, fue algo así como un secreto telepatico; mientras te ibas mirándome tus ojos reflejaban una alegría pícara, tu expresión parecía decir que veías algo que te daba gusto, quise abrazarte más pero ya teníamos que seguir nuestros caminos.

Se que lo sentiste, soy muy feliz estos días.

Yo tampoco te lo dije, pero no quiero olvidarme esta vez; ayer mientras te ibas sentí que presenciaba el inicio de una nueva etapa, linda y brillante.

Todo va a estar bien. Vamos a ser felices.




martes, 26 de julio de 2011

IX Congreso de Terapia de Artes Expresivas

Si trabajas con personas y grupos tanto desde la pedagogía, la psicología, el couching, el arte, no te puedes perder la oportunidad de asistir a este Congreso.

Vienen más de 70 terapeutas de arte de diferentes partes del mundo que realizarán talleres vivenciales muy interesantes.

Entren a chequear:



Whatever

Hoy me levanté cantándola.


La primera vez que la escuché fue cuando tenía como 15, tirada en el piso de mi casa comiendo pizza con Eric mi amigo del colegio. Nos habíamos tirado la pera del Británico y según nosotros la sustituíamos escuchando música en inglés.

Recuerdo que él tenía esa canción en un disco single que además tenía una versión sinfónica que yo repetía una y otra vez sin que el se quejara. Sólo nos tirábamos cada uno en un mueble con nuestro respectivo pedazo de pizza, calladitos. A veces alguno movía un pie, una mano al ritmo de la música. Yo disfrutaba mucho de eso.

En ese momento Eric era mi mejor amigo y me encataba la capacidad que tenía de poder quedarse en silencio, sin hacer payasadas para llamar la atención, diciendo la palabra justa en el momento necesario, me gustaba que como a mi le gustara Oasis. Siempre quise quedarme con su disco. Nunca me dejó.

Al final de ese año él se fue a vivir a España. El año siguiente me envió mi propio disco de Oasis y escucharlo fue algo así como una oda al recuerdo de webeo significativo.

Hoy que la ando cantando, pienso que siempre será una de mis favoritas.

viernes, 22 de julio de 2011

Ideas y planes por lustro

Cuando tenía 5 creía que tener 15 era un montón. Un día en el salón me preguntaron cuantos años tenía mi mamá:

- Quince.
- ¿Quince?
- Si.


Y seguí escribiendo con crayola. La pura verdad no tenía la menor idea, nunca se me había ocurrido preguntar eso... ¿que edad podrían tener las mamás? ¿Edad de mamá? A mi edad infantil todas las mamás se me hacían standar, creo que sólo los adultos se dan cuenta de las edades a las que uno se supone debe hacer algo.

Cuando le conté a mi mamá se rió en mi cara y me dijo que eso era muy poquito. ¿Cómo iba a ser muy poquito? ¿Si son dos números?, pensé. Yo imaginaba que a los 15 ya trabajaría y viviría en algún otro lado. Si... en otro lado, tenía una imagen de vivir en una casa verde turqueza, con cabello largo amarrado en una cola, vestido de cuello camisero y zapatos chatos, tomando leche en la cocina. Esa era mi imagen.


Cuando tenía 10 quería ponerme los vestidos pegados al cuerpo que estaban de moda y le pedí a mi mamá que me comprara uno. Luego de mucho insistir fuimos a una boutique para niñas y encontre uno que me encantó, me lo puse y salí del probador. Mi mamá me vió y tratando de esconder la risa me dijo:

- Hijita creo que no te queda, estas muy chiquita todavía.


Yo me molesté terriblemente, no por lo que ella dijo si no porque en verdad parecía un cabanossi. Yo queria crecer para tener curvas, quería ser más grande y voluptuosa.


Cuando tenía 15 las curvas iban apareciendo levemente y por mientras la gente empezaba a hablar acerca de cuales eran los planes para el resto de la vida. Yo dije con mucha seriedad que quería estudiar teatro; mis interlocutores hicieron un solemne mutis y me dieron posteriores sonrisas.


Yo quería eso pues, ¿que tan dificil podía ser? pensaba en ese momento... Hay que organizarse, visualizar el objetivo y ponerse a hacer.

Y mi plan iba más o menos así: Seguir la formación de maestra de ballet de la cual me faltaban 2 años, irme a Londres para dar mis últimos exámenes de la Royal Academy of Dancing, regresar a Perú a enseñar (para ganar algo de dinero), empezar de lleno lo del teatro y terminar de estudiar como a los 23, explorar un año en eso que estaba para ver que más hacía despues, comprometerme a los 24 (porque seguramente ya estaría en alguna relación seria con alguien por algún buen tiempo, seguramente mayor que yo, seguramente con un oficio diferente al mio porque para locuras suficiente con las mías), casarme a partir de los 25 (Siempre he querido casarme, nunca convivir) y empezar a ver que más. Sólo había que seguir el plan. (El plan estaba un poco Yuppie... ja!). En verdad a los 15, diez año se me hacía muchísimo tiempo.

Mi imagen de 15 se vió bombardeado por varias cosas y de los estudios sólo quedó las ganas del teatro, en un formato que no era precisamente el planeado y con algunos retrasos inesperados... pero bueno... Me dejaron claro que Universidad tenía que ser y en verdad no me quedó muy claro por qué en el momento, pero recuerdo los comentarios de la psicologa del cole diciendo "De eso no se vive, eso es un Hobbie, la gente no vive de sus Hobbies", psicóloga tonta.


Entonces, a mi se me ocurrió que si una universidad ofrecía una carrera relacionada a las Artes Escénicas es porque creen que se puede vivir de eso. Pues éramos varios y era más que suficiente para mi.


Se iban terminando otro lustro y entre otras molestias, tenía que ir de 8 a 5 a la academia pre universitaria a hacer problemas de álgebra y webadas varias en asientos diminutos. En verdad no me gustaba ir, pero en orden de entrar a la universidad estaba obligada a hacerlo. Así que todas las mañanas al vestirme me decía a mi misma que estaba allí como paso para llegar a algún otro lugar más deseado.


Al vestirme también pesaba en todas las cosas que me molestaban: el no seguir bailando; el estar haciendo álgebra en vez de teatro; en tener que disfrazar mis deseos con imágenes de vida universitaria para que estos pudieran ser entendidos en mi familia (y estar lográndolo sólo parcialmente); en que mis planes de terminar a los 23 se estaban aplazando dos años más, que parecía que todo el crecimiento proyectado en mi mente se extendía y no sólo en mis planes, si no también con mi cuerpo.

A los 19 estaba muy molesta por no tener tetas, yo quería un escote lindo, sostenes de encaje curvilíneos, vestidos de cuello V profundo, mi vestido pegadito de los 10. De la cintura para abajo estaba absolutamente todo bien (la danza forma cosas maravillosas), pero para arriba, bueno... no era tan completo en mi percepción adolecente.


Un día frente al espejo me dije: Siliconas! Si. Y se lo dije a todo mundo. Iba a ponerme siliconas, unas chiquitas no más, fantaseaba con el relleno de mi sostén frente al espejo y pensaba que iba a comprarlo todo nuevo. No pensaba en post- operatorio, ni dolor, ni en pezones cortados fuera de su sitio o en cicatrices, tan sólo en el volumen, en la estética de mi sostén.

En verdad nunca jamás hubiese podido ponerme siliconas, el pensar en agentes extraños en mi cuerpo me pone nerviosa, pero la impaciencia - inconciencia del momento estaba ligeramente elevada.


- Esperate a pasar los 20, dijo mi mamá un día.

Era cierto.

Cruce los veintes y oh! algo empezó a suceder ese año (y los 4 años siguientes). Llegados los veintes mi buen derriere, mi floreciente pecho y yo estabamos hinchados y confundidos por todo en la vida.

Todo... todo intensamente en silencio.


Todos los por qués bien apegados: Que por qué no seguí bailando, que por que estaba en una universidad si yo queria estudiar teatro, que me gustaba estar en la universidad pero ese no era mi plan, que yo quería cantar pero no canciones de misa, que por qué me jodian tanto en casa si yo siempre me portaba bien (En verdad muy bien), que me molestaba mucho que todo allí fuera un "que si que no que nunca te decides", que eso me confundía mucho, que tal vez estaba malgastando el dinero en algo que no era mi plan y esa era una inconciencia, que mi plan no era apoyado, que tal vez no lo había explicado correctamente, que ya no me importaba que no crean en mi con tal que paguen, que no tenía ni medio novio porque no me gustaba ni medianamente alguien, que las nuevas personas que conocía me parecía que iban a ritmo de caballo desbocado en Yombina y yo me sentía Yombinicamente a paso de caminata, que no me encontraba dentro de ese grupo de personas, que extrañaba a mis otras personas, que sentía que caminaba en una nebulosa, que me preguntaba si yo realmente quería eso que iba sucediendo y que si no quería que iba a hacer. ¡Qué!¡Qué! ¡QUÉ!


Y con tanto sapo en la cabeza traté de hacer una hilación que me permitiera sostener en algo tanto deseo y tanto no saber. En verdad mis incipientes veintes los recuerdo bastante borrosos, algunos chispazos de claridad, otros de mucha angustia y algunos otros de hacer por hacer.


Recuerdo que trabajaba y trabajaba por alcanzar algo que en ese momento no me quedaba muy claro o tal vez era que había perdido un poco el entusiasmo del inicio. Creo que había perdido un poco el rumbo, a veces uno simplemente se pone a completar piezas que no llegaron por default como para el resto; para mi creo que fueron muchas piezas faltantes. Construir un camino confiando en que vas a encontrar la forma de completar los espacios vacíos con formas propias es algo positivo, pero tambien puede ser un camino muy acompañado de desasosiego.

Y en esos afanes fui terminando el primer lustro veinteañero, donde contra todo pronóstico propio me enamoré y pensé que había encontrado al amor de mi vida. Fueron de revolución aquellos días.

Yo no pensaba enamorarme de nadie, había terminado una relación que me había dejado pensando que tal vez, yo era una de esas personas que nunca se enganchan con nadie. Triste, pero si es lo que hay es lo que hay, pensaba.

En buena hora, ese "es lo que hay" se fue destruyendo a medida que por fin me empezaba a entrenar en lo que había querido desde un inicio. En el ir y venir entre el teatro y la danza habían cosas que iba descubriendo y me era muy dificil poner en palabras, algo sucedía que me invitaba a estar de acuerdo con el "no saber", más abierta a explorar sin preconcepciones y sobre todo más dispuesta a dar de mi sin armaduras.

En esa coyuntura personal me enamoré, todo lo anterior lo puse en práctica porque de alguna manera se estaba convirtiendo en parte de mi vida y las nuevas facetas que iba encontrando me eran tiernamente agradables. 

Una revolución en todo sentido, de pronto me di cuenta de lo contenta que estaba con mi cuerpo, dándome cuenta de que mi sexualidad era algo que me hacía tremendamente feliz y que por primera vez en la vida la pensaba sin miedo y con mucha alegría. Me encontré diciendo cosas que nunca había dicho y escribiendo cosas sin pensar en la forma de la prosa, haciendo cosas por el deseo de hacerlas y con ganas de que eso cresca.
Fui muy feliz esos días, más alla de estar feliz por las personas que me acompañaban estaba feliz porque sentía que algo dentro de mi se iba cuajando, no sabía muy bien que... pero en algunos casos, tengo la política de disfrutar de los sucesos en vez de detenerme a analizar el por qué de sus fundamentos, sin pensar en los pasos futuros porque lo que esta sucediendo en el instante es importante.

Sentía que estaba en camino a donde me imaginaba y que de alguna forma también estaba redireccionado la carrera y que a eso se le haya sumado el estar enamorada era un super plus. Estaba contenta, sentía que había encontrado una persona que entendía mis momentos de individualidad y mis momentos de querer estar pegada como chicle, que parecía estar en onda con mi necesidad de silencios presentes y dispuesto a dar una mirada a los otros lenguajes que manejo mejor que las palabras.

Pero de individualidades y pocas palabras también nació el fin de una etapa grande en mi vida. En poco tiempo tuve que dejar las clases, buscar un trabajo para sobrevivir, mudarme y quedarme sin enamorado estando terriblemente enamorada.

Pasé mis 25 soltera, con la carrera en stand by y con un trabajo que no se acercaba ni remotamente a lo que yo me había imaginado de niña, puber o adolescente; adoleciendo de un sólo pensamiento: Todo esto no sirve para nada; tanto planear, tanto ordenar, tanto portarme bien, tanto hacer las cosas correctamente, tanto amor, tanta dedicación, tanta flexibilidad. Todo esto no sirve para nada.
Me caí como torre de lego, se me deconstruyó todo pendejamente... cuanto lloré sin entender (o sin querer hacerlo). Es dificil encontrarle el sentido a esas deconstrucciones que nos pasan en el camino, ver piezas olvidadas, escondidas o rotas y tener que armar algo con eso, ver si quieres armar algo desde eso, si botas o reciclas. Lidiar con los olvidos, lidiar con las ausencias.

En parte, esas decisiones y el cómo las realizas van contruyendo  la persona que uno quiere ser realmente, aunque a veces no nos damos cuenta del todo. Las deconstrucciones entre etapas de la vida tienen para mi un amor - odio dificil de definir y los primeros años posteriores a mis 25 tuvieron  matiz de "Baja policia" y son los que he sentido como más largos en toda mi existencia.

Mientras todos mis recuerdos propios y los recuerdos de mis personas se sacudian del polvo de mi hecamtombe personal, yo iba escogiendo: reescribir, repetir, recomenzar, mantener, sostener, devolver, desechar... pensaba que todo ese dolor y amargura que sentía no podían ser ignorados, así que si algo iba a suceder permitiéndome sentirlo pues simplemente, iba a suceder en ese momento.

Me descubrí de una forma que no esperaba, no fue fácil y ciertamente por momentos fue desgarrador; no tenía ni la menor idea de lo que iba a pasar conmigo, pero tenía fe en que iba a encontrar la forma de hacer algo. Nunca me permití llorar tanto como lo hice desde momento y de alguna forma todas esas lágrimas también lavaron muchas cosas en mi.

Creo que una de las peores cosas fue el tener que lidiar con el afuera, con las opiniones de la familia, con las opiniones de los amigos que creen conocerte, conocer tus deseos y que tienen ideas de lo que deberías hacer, con los tiempos que la sociedad exige de nosotros sin distinción de codiciones. Me fui dando cuenta en el camino que muchas personas en el mundo pueden seguir adelante obviando la mitad de sus sucesos y que yo tengo una necesidad de procesos, que mi forma de pensar y hacer las cosas tiene que ver con construir y reparar, con tejer redes y caminos que puedan sostenerse en el tiempo porque han sido hechas con dedicación.

Eso toma más tiempo, claro que sí... y en este mundo de apurados en que vivimos es algo poco entendido; pero ya partida en pedacitos me dije que si no podía respetar mis tiempos, probablemente nunca podría respetar los de nadie. Así que hice un poco oídos sordos y me senté a reparar - me.
Hoy, a unos meses de cumplir 30 años pienso que estoy muy contenta de que los veintes se me esten acabando simplemente porque han sido años muy turbulentos. Aunque bueno... los 29 vienen siendo realmente geniales... Juro que nunca he recibido tantos elogios como desde que cumpli 29, hay algo que se irradia desde dentro cuando has aprendido a aceptar unos cuantos sin sentidos y claro, cuando los vestidos pegados te quedan realmente espectaculares.

Siento que ya no estoy más en la carrera maniaca de hacer algo para conseguir llegar a donde quiero, creo que ese es uno de los cambios más significativos del final de mis veintes, siento que por fin estoy encaminándome hacia donde quiero estar, mis sueños estan sucediendo aquí y ahora, lo que hago me hace inmensamente feliz.

Mis sueños de trabajar en arte estan sucediéndome todos los días, bueno... medios días en mi vida paralela como dicen mis amigos, que más que paralela siento que es transicional, pues todavía tengo un trabajo administrativo de 8 a 5, pero de ahí en adelante transito en tiempos y espacios que reafirman mis proyectos de vida, que estoy en donde quiero estar y me hace muy dichosa saber que puedo sostenerme y ser consistente en esto.

Eso es colosalmente grandioso.

Siento que los 30 me estan llegando con una templanza más pausada, con una lujuría bastante divertida y con palabras más abiertas y confiadas, pero sobre todo, con una calma que no había experimentado así en mi vida entera.
Me he dado cuenta que aunque planee siempre aparecen cosas que hacen que formatee el camino y hasta ha empezado a parecerme divertido, tal vez es que mis 20 me han enseñado a enfrentar mejor la incertidumbre. Creo que de alguna manera (y aún siento raro pensarlo y escribirlo) ahora estoy segura de que pase lo que pase, voy a resistir, voy a llegar.

Ahora pienso que en el fondo siempre he pensado en construirme primero y antes que nada. Pienso que ese yo construido es lo que ahora tengo y creo que con eso, podré recibir mejor lo que tendré.

Tengo millones de planes para el futuro, terminar la maestría, irme a vivir fuera de Lima, fuera del Perú algún tiempo, quiero enamorarme de alguien y espero que alguien se enamoré también de mi, quierocompartir todo esto que me esta sucediendo, quiero aprender a hacer planes en conjunto y no sólo individuales; pero al final de todo creo que mi único plan seguro para los 30 es disfrutar y revolcarme como chancho en todo lo que haga, porque en verdad tengo unos planes maravillosos que quiero ver como van a modificarse.

miércoles, 20 de julio de 2011

martes, 19 de julio de 2011

Unfinished



Pero todos estábamos en eso, lo he sabido siempre sin poder encontrar las palabras y lo saben ahora ustedes que ya no hay más que decir.

Aún frente a frente nunca estuvimos en el mismo lugar. Me pregunto porque nos amamos con tanto egoísmo... lo único que puedo decirles es que ya no es nuestro tiempo, ahora que nos amamos completos ya no es nuestro tiempo.

Los descontentos siempre resonarán en las paredes, la negación de nuestra vida pública, las puertas abiertas por las que decidieron irse anunciando mi incapacidad de hacer lo que en disimulo esperaban de mi.

Si, me destrozaron, de esa que había no queda nada.

Aún así se pelearán los despojos porque nunca fue suficiente, se llevarán retazos de mi piel muerta para curbrise los ojos y negar que todo se ha desvanecido.

Ahora liberada no desmiento mi silencio y tampoco condono sus desapariciones, sólo puedo decirles que cuando nuestros recuerdos tocan la puerta, no encuentran el desprecio con el que me reciben cada que niegan el saludo. Yo los invito a bailar acunados en mis manos, diciéndoles que fueron amados para por fin despedirnos.

Inconclusos se quedaron muchos instantes que regresan ahora a buscarlos, inconclusos se quedaron ustedes, con sus amores a medias, sus reproches ciegos y su ansia de seguir mirandose el ombligo. A la llegada de esos días me recordarán por eso... por las puertas abiertas de mi casa tibia, por mis secretos en las ventanas, recordarán que mi única imposición era el mantener el aíre que nos sostenía juntos.

Ahora, en este momento de encuentros espontáneos, sin querer como siempre, aparecen no se si en busca o ofreciemiento de algún resarcimiento.

Yo sólo puedo decir que todos estabamos en esto y en memoria de ese efímero amor nuestro, espero algún día perdonarlos.

jueves, 14 de julio de 2011

Sobre la luz

La luz que solamente es luz
Cuando ilumina una cosa
No es la luz verdadera. La luz
Que pasa velozmente y no deja sombra
Que todo lo sostiene y lo anima
Es quizás la luz divina. Pero la luz
De que hablo es otra luz
Hundida en mi memoria como un anillo de oro
En la espesura. Es una luz que brilla
Muy rara vez en la vida
Que no tiene peso ni medida
Pero que convierte el corazón
En una estrella
Una luz que no se explica que no
Se explica que improvisamente aclara
Todo lo que existe
Como si fuera un espejo
Ante un vado de agua pura
Un fulgor escondido
Un diamante que no duele
Dulcemente y que nos nubla la mirada
Una suerte de esplendor vacío
Que sólo se percibe como oscuridad
O ceguera. Una luz
Más clara que la misma luz
Del cielo pero más humilde
Más cercana a nuestra mano
A nuestra pobre luz de cada día
Hecha de millares y millares
De cosas sencillas
De átomos que nacen
Y átomos que mueren
De centelleantes fragmentos
De otras cosas
Que igualmente nacen resplandecen
Y perecen.


Jorge Eduardo Eielson
De Celebración (2001)

lunes, 27 de junio de 2011

Finde

El finde por la tarde limpiaba mi casa mientras cantaba y tuve la sensación de que iba a enamorarme pronto... que será... mi yo esperanzado.

Le dí vueltas un rato a mi idea de mi yo enamorado, a la idea de cuanto me gusto así y de las ganas que tengo de que alguien me ame con mi locura y mis soltadas de indirectas directas.

Entré a bañarme mientras cantaba y me reía de sentirme sonsa, de imaginarme que seguramente en la reunión a la que iba podría encontrar el amor.

Me la pasé tarareando canciones mientras me cambiaba 3 veces de ropa.

Salí de casa, me subí al bus y en la radio sonaba: Amor en el aire... que nació del aire... Me dió ataque de risa.

En verdad no encontré nada nuevo, salvo un recordatorio de algo que me quedó grabado en la piel despues de mi seminario de movimiento auténtico. Pronto voy a escribir acerca de eso.

Hoy, me encontré esta cancioncita que me ha hecho la transferencia intermodal. Cantemos, cantemos...



But if your love should cross with mine
I will be here on your side
As long as you want me to be
I’ll not be going far or wide
Running, walking, standing still,
Sitting, laughing - that I can do
And wishing, wishing
It could be me to dance with you

lunes, 20 de junio de 2011

Serena


El fin de semana el movimiento me mostró mi yo al encuentro con alguien, la forma en que llegó la imagen desde mi cuerpo ha sido clara y perenne.

Mi deseo secreto de crear un espacio íntimo impenetrable, de lento reconocimiento, donde nazca una intuición compartida que nos ayude a conducirnos, a leernos, a sentirnos.

Lo que he recibido ha sido conmovedoramente sereno, como ola de bahía.


jueves, 16 de junio de 2011

IX Congreso de la Asociación Internacional de Terapia de Artes Expresivas

“Viviendo en la Incertidumbre: la diversidad como travesía sanadora desde las artes expresivas” 10 al 16 de Agosto - Lima y Cusco.

Por primera vez en Latinoamérica se llevará a cabo un evento que reunirá a más de 80 expositores de diferentes partes del mundo, quienes compartirán sus experiencias y trabajos de investigación relacionados con la Terapia de Artes Expresivas en contextos clínicos, educativos, organizacionales y comunitarios.


En la Terapia de Artes Expresivas se utilizan las diferentes expresiones artísticas (artes plásticas, música, danza, movimiento, drama y poesía) para que a través de ellas una persona o grupo logre expresar su mundo interno, sus potenciales y conflictos. En este proceso de hacer arte los participantes irán encontrando significados a sus vivencias, poniéndose en contacto con aspectos nuevos que le darán un mayor entendimiento a su problemática.


El IX Congreso Internacional en Terapia de Artes Expresivas: “Viviendo en la Incertidumbre: la diversidad como travesía sanadora desde las artes expresivas” se llevará a cabo durante la semana del 10 al 16 de agosto del 2011, bajo la organización de TAE Perú (http://www.taeperu.org/) y la Asociación Internacional de Terapia de Artes Expresivas (International Expressive Arts Therapy Association – IEATA http://www.ieata.org/).Los talleres y conferencias tendrán lugar en la Casa Prado (Av. 28 de Julio 878, Miraflores). Además se realizará un día de Pre Congreso, en donde se conocerán algunas experiencias locales que desarrollan un trabajo artístico y comunitario desde una perspectiva de cambio social. Por último se llevará a cabo una experiencia vivencial en Ollantaytambo, Cusco.


Para mayor información los invitamos a visitar nuestra página web: www.taeperu.org/ieata2011 , a través de la cual también podrán efectuar su inscripción al Congreso. Hasta el 17 de Junio podrán inscribirse con un 20% de descuento.

Agradecemos su difusión.

Tae Peru
http://www.taeperu.org/
(511) 241-4452
(511) 9924-32436

lunes, 13 de junio de 2011

Conversación de percepción.

A. dice:

porque estas molesta?

V. dice:
no
?

A.dice:
si V.  yo lo siento
tengo esa facultad de sentirte

V. dice:
y como es esa facultad de sentirme??? de dnd salió eso?

A. dice:
Salio de la necesidad por tener una buena realcion contigo, hubieron momentos de tensa calma que me llevaron a entender que lo que yo creia que estaba bien no lo era
entonces
comence a analizar algunos comportamientos que me indicaron ciertas formas
y fue en ese momento que empece a sentirte

V. dice:
como fue eso??
A. dice:

ya no me analices tanto tampoco
jajajaj
solo se que nos llevamos mejor y no es producto del tiempo y la casualidad
es producto de que ahora te puedo sentir

V. dice:
jajajaja
no ete stoy analizando, soy curiosa nada mas
es bonito lo que me dices
es algo que me pregunto siempre
que es lo que ahce que uno empiece a sentir a las personas sin importar la cercanía

A.dice:
interes
creo que cuando te interesan las personas te detienes mas en ellas
crear un vinculo duradero no solo implican años juntos o años de ser conocidos

V. dice:
Pues si
yo también creo eso.
Sólo que me pregunto que es lo que percibes?


A. dice:
por tu forma de escribir y contestar que ya te saque de quicio

V. dice:
JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA
JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA

A. dice:
tambien me da la impresion que no te gusta mucho el pasado y percibo otra energia

V. dice:
A que te refieres con pasado??

A. dice:
las veces que hemos conversado cosas del pasado he sentido que mucho interes no tienes de darle cuerda a esos asuntos, puede que este equivocado

V. dice:
Supongo que cuando siento que para mi ya es algo que tiene un sitio en el pasado de mi cabeza, no le doy muchas vueltas. Ahora, lo que yo tenga claro en mi cabeza no tiene porque estar claro en la cabeza de los demas

A. dice:
totalmente de acuerdo
pero no te molestes conmigo
mira que te quiero mucho

V. dice:
jajajajaja
no me molesto
hablo asi nomá
el día que me moleste, te vas a enterar.
pero si quieres hablar algo, preguntame
osea, no es que te vaya a mandar a la mierda

A. dice:
eso me deja mas tranquilo
ya regreso.
un besote
hay algo que no estas para saberlo ni yo para contartelo

V. dice:
ah?

A. dice:
como en el comericial de KFC
recuerdas a la viejita
que le dice a sus nietos

V. dice:
jajajaja
a cada uno que es su preferido???

A. dice:
si
exacto
tu eres mi favorita

V. dice:
jajajaja
jajajajajaja
jajajaja
una de tantas
favorita al fin
jajajajajajaja

A. dice:
jajajajaja
hay V. porque no eres una niña normal ??
jajajaja

V. dice:
ajajajajaja
Si.... ese ha sido siempre el dilema de la vida (de los otros)
no soy una niña "normal"
solo soy yo.

A. dice:
y eso es lo bonito

V. dice:
;)

A.dice:
ya regreso flaca.

lunes, 23 de mayo de 2011

La puerta del invierno

Cuando llegué yo sabía que estaba dentro de mi cuarto, subí las escaleras mientras saludaba a las personas que pasaban. Encontré la puerta abierta y caminé por el pasadiso, vi al fondo la puerta del baño también abierta e iluminada, supuse que estaba dentro.

Todo era un poco extraño, esas eran mis cosas si, pero el espacio había cambiado, me parecía todo diferente, como si no fuera el lugar donde usualmente duermo. El closet estaba abierto, "Hay más ropa de la yo pensaba" me dije mientras caminaba como gato cauteloso en ese espacio que sentía un poco ajeno.

La ropa estaba guardada y la cama tendida, el mueble donde tiro mis cosas estaba despejado y hasta parecía haber crecido en tamaño, como si en mi memoria hubiese sido sólo para uno y a mi regreso hubiese sido para dos.

Seguí entrando y vi una escoba frente a la cama, la ropa limpia estaba sobre un planchador lista para ser alisada, me quedé mirando todo un segundo, cómo extrañada de que hubiera tanto espacio y claridad en la habitación.

Entonces apareció detrás de mi, me dijo algo al oido y nos besamos.

"He estado limpiando... ahora si voy a hacer todo bien" le escuché decir mientras yo caminaba por la habitación mirándolo todo y sin tocar nada, veía las cosas que reconocía mías pero que tenían el toque de alguien más: Mi cama y mis sábanas pero con una colchita marrón, la puerta abierta del closet también marrón con unas camisas dentro, mi sofá al lado y no frente a mi cama como lo recordaba.

Era cierto, habiendo movido todas las cosas se veía bastante mejor, el espacio fluía mejor, luz entrababa mejor, el sitio parecía estar oxigenado y aunque me daba cuenta de eso, seguía sintiendo que algo no estaba bien ahí.
"Has estado limpiando" le dije mientras entraba al baño, me sentía un poco asombrada de lo que veía. El baño estaba impecable e iluminado, el color amarillento del marmol relucía junto con los espejos, me gustaba ver todo tan limpio. Me senté en el filo del tocador, "Esta todo muy lindo" le dije, él me dió un beso

La puerta estaba abierta, salí del baño y me dirigí al otro lado, justo al pasar por la puerta de calle, me tomó de la cintura y empezó a besarme contra la pared. Yo con los ojos abiertos podía ver por la ranura de la puerta, había gente subiendo las escaleras, pasando por el pasadiso. Dejé de besarlo.

- Hay gente subiendo.

Él, sin dejar que me moviera empujó un poco la puerta con la mano y siguió besándome, me dió la vuelta hacia el corredor detrás de la puerta donde nos escondimos y empezamos a hacerlo. Él se recostó en el piso y su cuerpo funcionaba a manera de tranca si es que alguien trataba de abrir la puerta, yo encima  pensaba en cuanto me gustaba verlo, ver la forma de sus brazos mientras me sostenían, lo veía allí conmigo y pensaba en que aunque me gustaba, había algo en mi pecho que ya no estaba más ahi.

Tu lo sabes todo de mi -me decía a mi  misma mientras me tocaba- tu sabes todo de mi y no es suficiente, tu sabes todo de mi y esto también lo debes saber; pero me miras con ternura, tus ojos parecen pedirme que no sea cierto.

Miraba al frente y veía que esa vía que él había limpiado a mi me causaba disonancia, veía la luz brillante que salía de la puerta del baño y pensaba que ese lugar en medio entre ella y donde estaba revolcándome con él me causaba un miedo, incomodidad... incertidumbre.

Su voz en mi cabeza se repetía entre mis pensamientos "Ahora si voy a hacer todo bien... Ahora si voy a hacer todo bien".

"Hacer todo bien"

¿Que era hacer todo bien? ¿Decir todo lo que me estaba incomodando de esa habitación?¿Decirle que miraba su cuerpo y me gustaba de todas las formas posibles y a pesar de eso no encontraba un atisbo del amor que sabía que había habido? ¿Que me sentía fragmentada? ¿que mi cuerpo estaba dejando de sentirlo porque no encontraba por donde estaba mi corazón y mi cabeza no paraba de emitir ideas que se mesclaban con sus palabras? ¿Eso era hacer todo bien?

El me miraba así, con la ternura de sus ojos de canica y yo tenía deseo de huir, de no decir nada por miedo, de acabar todo para no tener que lidiar con eso. ¿que esta bien?.

Tenía miedo de decir que me sentía invadida, que no sabía si sólo era eso o si es que tenía miedo de estar haciéndolo con el y estar alimentando algún sentimiento que no estaba segura de tener, tenía miedo de pensar que tal vez diciéndolo todo iba a aclararse y que eso podría afianzar o terminarlo todo.

Miré sus manos que me gustaban tanto, sus ojos de canica, mi ser semi desnudo, mi miedo terrible.

Desperté y pensé en los otoños en donde los árboles se desprenden  de sus hojas muertas y parecen ser seres solitarios, en la puerta del invierno dónde parece que todo agoniza, pero nada esta muerto.

lunes, 16 de mayo de 2011

Encontradas y reencontradas de fin de semana

Fin pajita :)

Nada como un buen viernes toneando y riendo de la gente que se hace la caleta con los buenos amigos. La pituquería Limeña de algunos bares es una ridiculez y a pesar de que de cuando en cuando caigo en ellos, siempre siento que es un nivel socio cultural con el que no me indentifico. Tanta delgadez lacia y rubies a la mode me da a pesar como es que los limeños vivimos tanto de apariencias; hacen que yo ponga mi mejor cara de limeña "me llegas" con ceja levantada. Lo bueno, es que fui con las personas adecuadas para poder burlarme, eso más unos chilcanos, pueden hacerle a uno la noche.

Y hace un montón que no me comía una ratburguesa con pickles y papitas, toxicity 100%, pero en verdad es algo que me gusta a pesar de todo.

El sábado, luego de dormir hasta sentir hambre, fui de compras y regresé a mi casita a cocinar, en verdad todos estos días he estado comiendo malaso y mi cuerpo lo siente. Así que me hice una sopa de menudencia de abuelita que me la debe haber mandado la mía desde el cielo porque quedó tan rica que no pude dejar de repetir.

Mientras cocinaba me di cuenta de lo contenta que me pone hacerlo, es verdad es un cosquilleo inexplicable. Llego a casa con los víveres, los ordeno y siento deseos de comer comida casera toda la semana, de servirla bonito y calientita.

Mis amigos de la chamba se rien porque dicen que yo enamoro a mi comida... jajaja... y bueno, un poco... si... es que tengo en la cabeza las historias de las mujeres de mi familia que se sentaban conmigo a comer diciendome que la comida era como soldaditos que cuidaban mi cuerpo desde dentro, que venían haciendo un gran esfuerzo y desde muy lejos para alimentar a los niños, entonces las arvejas tenían vocecitas y el resto de verduras bailaban también en las ollas acompañando el canto de mi abuela mientras se cocinaban. Así que cuando yo preparo algo voy cantando y cuando lo sirvo ando diciendo que mi arroz esta hermoso y mi palta esta muy guapa, me da gusto comer así.

Y si de buenos cocineros tengo que hablar, esta tanmbién mi amigo Manolo, con el que me junto siempre a hacer pasta en todas las versiones y colores. El domingo fui a su casa a cocinar, escuchar música y ver pelis.

Mientras comíamos nuestros tallarines con montones de cositas, estuvimos viendo videos y reencontré un grupo que me parecía muy simpático y hace un montón de tiempo no escuchaba:



Este video me pareció genial:



Y el hallazgo del día para mi fue esta versión de "¿Porque te vas?" de Jeanette, de una peli que se llama algo así como "tu vida en 65 minutos" o algo así... debo decir que esta versión me gusta más que la original.



Me contaron también que Jeanette era inglesa y cantaba con un grupo que hablaba español, asi que parece que muchas de las cosas que cantaba no las entendía... Ahora la cara de impavidez que tenía mientras cantaba me hace pleno sentido.

Con este patalee de risa, hay grupos peruanos tan divertidos:




Nos pusimos a ver Pelis y me dormí en la primera... para variar... grato fue mi despertar con la música de esta otra que esta realmente bonita: "Once" . La banda sonora me gustó:









Me gustan las peliculas asi, donde el amor toma sentidos diferentes, muy sentido, pero sin tantos dramas.

Dormí soñando mucho, soñando tranquilo.

Esta fue la canción con la que me recibió la radio de la oficina:



Buena semana para todos :).