lunes, 19 de julio de 2010

Era impersonal Valeria...

El domingo se quedó a dormir en mi casa, debo decir que es riquísimo dormir con alguien... ahora... hay varias cosas que me dan vueltas en la cabeza...

Toda la situación ha sido cómoda porque no me llama a preguntarme si es que ya terminaron mis citas con el presidente y si ya estoy disponible para verlo... en verdad debo decir que lo he cancelado tantas veces que hasta yo me siento ridícula... y simplemente porque en verdad estaba haciendo cosas importantes. Aún así parece que no tuviera una pisca de molestia... si no puedo sólo me dice: ya... entonces... te parece más tarde como a tal hora? no se impacienta, no nada. Lo cual me parece exelente, porque a pesar de que pienso en él, no quiero llamarlo, porque no quiero involucrarme en nada ahorita porque yo estoy muy complicada (Aunque estoy llegando a pensar que nunca dejaré de estarlo).  Él no se hace bolas, sólo me dice que esta bien y quedamos para otro día, no es un stress pensar en que tengo que llamarlo porque si no puedo herir su suceptibilidad... NADA.

El otro día me preguntó algo así como ¿Por qué a pesar de que  a veces uno tiene evidente interés en alguien, el otro no responde? ¿que es lo uno esta haciendo mal? Yo le contesté que bueno... que el estaba asumiendo que estaba haciendo algo mal y que en verdad no tenía que ver específicamente con eso, si no también con lo que el otro estaba dispuesto a dar o recibir, recuerdo que le dije: Tu puedes hacer todo bien y a pesar de eso el otro puede decidir no querer recibir lo que le dan por un millón de razones que no tienen nada que ver contigo... Yo no se bien esto... pero en verdad creo que es un azar. Sólo me miró y me dió un beso. Yo no se que significa eso, pero... bueno, tampoco voy a discutirlo.

Igual me llama para verme y cada que llega apaga todos los ruidos... la tele, la música, TODO.  Pregunta cosas, habla también, pero me escucha todo el rato en silencio, en el silencio de mi casa, me abraza, me abraza bonito en verdad, me besa en la mejilla mientras le hablo... huele mi cabello, me vuelve a besar calladito mientras yo digo 3 o 4 cosas porque no tengo ganas de decir las millones de cosas que pasan por mi cabeza, sólo unas cuantas. El se calla, escucha y frota su cara con la mia, pone sus manos frías debajo de mi ropa mientras me abraza, calladito hasta que termino y me pregunta alguna otra cosa.


No estoy acostumbrada al silencio... no me disgusta, me disgusta cuando estoy sola, pero con él al costado ¿ya no es silencio pues no? Sólo que el resto de chicos con los que he salido siempre todo ha sido alrededor de la bulla, claro... no LA BULLA, pero si con alguna distorción; comenzaban a besarme y prendían la tele o la radio, por unos momentos pensaba: Seré un poco ruidosa y buscan algo de interferencia (Por el ruido que saliera fuera de donde estabamos) en mi cabeza quedaba un rato esa palabra "Interferencia".

Pero él me escucha a mi, llega y me pide que apague la música, ¿Quieres escuchar otra cosa? No... y me abraza, me da un beso, se sienta. Me causa sorpresa la falta de bulla, me pone simplemente en otro estado y no me refiero a hornynesss... simplemente me causa sorpresa, mi atención cambia.

Dentro de toda la bulla que hay todo el día en la ciudad, con las personas, en el trabajo, en la combi, etc, etc. me he dado cuenta que en verdad valoro ese momentito de silencio y era tan simple como apagar la tele, cerrar la ventana y escucharse. Hace taantísimo que no hacía eso. A veces las personas nos sentimos obligadas a hablar o decir algo, es raro...

En medio del silencio, hace semanas le pregunté:
- ¿Que vas a hacer en Julio? 
- Me voy de viaje... a Washington.
- Oh... que lindo.

Sentí una amargura terrible, no se si se notó, me dieron nauseas... Esto siempre va a ser así, no quiero involucrarme en nada - pensé.

- Regreso en 3 semanas; me contestó.

Igual la amargura no se me pasó, las historias de presencias previas tienen un peso singular.

El domingo me llamó temprano y para variar yo estaba ocupada; "Te llamo a las 7" me dijo, puntual como siempre me llamó y yo todavía no terminaba:

- Yo estoy en Miraflores, puedo pasar por tu casa como a las 10.
- Ya, si termino antes, te llamo; le dije mientras pensaba ¿Te llamo le acabas de decir??

Ya sabía que era para despedirse, se iba el martes o le lunes no lo sé, no es que haya querido preguntarlo mucho.

- ¿Me puedo quedar a dormir contigo?
- Ehh... si.

Se quedó a dormir y me reí sus buenas horas... empezamos a hablar acerca de lo sin sentido que son algunas cosas, de las cosas que no tienen sentido sólo para uno y sobre las cosas que no vale la pena buscarle un sentido... de risa la conversa... No se a que hora nos dormimos, fue raro.

 En la mañana yo recontra zombie levantándome para ir a trabajar, me metí a bañar, sali en toalla a cambiarme y el me miraaaba y me miraaaaba y yo:
- ¿¿que pasa??
- Nada... estoy viendo como te cambias...
- Ok, es que no estoy acostumbrada a que me observen desde tan temprano...

Prendió la tele en las noticias y las cambió a otro programa (Gracias! ya no quiero ver más noticias...) y da la casualidad q era un programa con un psicoanalista que hablaba sobre el manejo de las emociones y las cosas que hablabamos ayer... Yo le digo: Ahí esta la contestación a todas tus preguntas de ayer... se rie y me dice: Si... Y yo: ¿que casualidad no?? (porque tambien habíamos estado hablando de eso la noche anterior).

Yo estaba recontra tarde... Lo dejé en mi casa, le dije donde estaban las cosas que podría necesitar usar... me despedí como si nada... en verdad como si nada... el había ido a mi casa porque se iba de viaje y yo me olvide de decirle chau... no se si me olvidé o incocientemente no quise y no lo hice, lo tuve que llamar de vuelta a despedirme... más lorna... Se rió.. regreso el 10 me dijo.

La cuestión es que me iba en la combi pensando en que se quedó en mi casa y bien puede ver y revisar todo lo que le de la gana, y yo siempre ando retraumada con eso de que se queden en mi casa, con "compartir" mi espacio con alguien más y en verdad en verdad cuando me dijo si se podía quedar a dormir lo pensé y no me pareció importante.

Sólo no me importa... que vea lo que sea, que este en mi casa, no me importa que este allí... mis cuadernos con ideas varias estan por todas partes y me sorprendo a mi misma porque creo que ya lo dejé pasar a mi círculo y no se ni como.
Yo quería que sea impersonal,aunque por el tiempo y las veces no es que sea tan impersonal que digamos, a pesar de eso sigo pensando que no lo voy a llamar y que no quiero hacerme ideas de nada porque despues me resulta otro psico-egoista-selfcentered- bastard y la canción pues no??? (Aunque luego de 2 meses de encontrones me queda claro que muy psico no es que sea)

Y me siento una quejosa, porque eso es lo que yo quería... alguien que no este apurado y me doy cuenta que la apurada soy yo, pues ni si quiera se si es que el esta en plan de seriedad conmigo (aunque lo parece) y tampoco se lo voy a preguntar. Me doy cuenta que la primera vez que lo cancelé horrible fue simplemente porque yo tenía ideas preconcebidad de lo que debía ser y no me puse a ver lo que era.

Lo bueno es que yo siempre confío en mi sensación y con él desde el día 1 fue de confianza, sólo por eso decidí verlo cuando volvió a llamarme despues de que lo cancelé 3 veces (en las que en verdad tenía que hacer y también en verdad use eso como escudo). Aún así llama y me pongo a pensar que ha de ser porque le intereso o tal vez simplemente porque soy buena en lo que hago.

Pero de cualquier forma soy yo la que desconfía y no hablo, ni pregunto, ni llamo, tengo sensación de animal golpeado. Aún así él sigue llamando y viniendo, viene con sus silencios, sus preguntas, sus miradas largas y sus acercadas para oler mi cabello antes de irse. No puedo evitar no reconocerme en eso y recordar que alguna vez, yo también miraba así a quien me causaba real interés y esperaba haciendo lo mio hasta que se abría eso, eso que no se cómo explicar.

Igual, no voy a llamarlo, pero estoy esperado que pase el 10 para darle un beso y hacerle una pizza que hasta el momento es lo único que he descubierto que le gusta comer, para que me cuente de los museos que vió y para que apague la tele y la música para que lo mire sólo a él.

- Era impersonal Valeria...
- si, por eso no voy a llamarlo.

No hay comentarios.: